martes, 29 de noviembre de 2011

"En esa época las crónicas definían un buen diario deportivo"



¿Cómo conociste a Huertas?
A través de la Escuela de Periodismo. Aquí hubo una, pero después desapareció. Y alrededor de 1964 vino un grupo de periodistas de la universidad de Madrid e hicieron un examen al que nos presentamos 50 o 60, y aprobamos 12: tu padre [Francisco González Ledesma], Lluís PermanyerHuertas,Gonzalo Pérez de Olaguer, entre otros, y nos hicimos bastante amigos. Teníamos que ir a Madrid un par de veces al año. Yo cumplí los dos primeros cursos. En el segundo pusieron una asignatura llamada “Normas para ser director de periódico”, vi que aquello no era para mí y lo dejé. No volví más.
¿De verdad te enseñaban a ser director?
Sí. Además, Antonio Valencia enseñaba Deportes. A mí me gustaban mucho sus críticas literarias y sus crónicas deportivas. Y es que en esa época las crónicas definían un buen diario deportivo. Pero en el examen te preguntaban: “Récord mundial de los 100 metros lisos” o “Natación: crawl”. Luego me hizo un par de preguntas con las que vio que a mí me gustaba el deporte, aunque no memorizara las marcas, y me aprobó.

lunes, 16 de mayo de 2011

Engrandecer la metáfora

Una de las grandezas del género de la crónica -de la crónica deportiva también- reside en su capacidad de construir metáforas. Retomemos el ejemplo de David Gistau y sus crónicas paralamentarias. En concreto, la crónica de "La 'espantá' del Faisán":


La crónica que aparece publicada en la versión en papel de El Mundo, por razones técnicas unidas al soporte, vinculan la metáfora al conocimiento y la capacidad de recreación e imaginación de cada lector. Pero en la versión online, que supera las limitaciones técnicas, tampoco aparece ningún enlace hipertextual.


Y a través de los enlaces hipertextuales podemos dar vida, casi recrear, algunas de las metáforas con las que se construyen los diferentes textos periodísticos, en este caso, la crónica parlamentaria. En este caso es trabajo del propio periodista, como narrador, adaptarse al nuevo entorno tecnológico que ofrece posibilidades maravillosas de reinventar y encontrar nuevos significados a unas realidades metafóricas a través del hipertexto.


Así lo explica José Luis Orihuela en este artículo:

"La estructuración de la información como espacio navegable, competencia central del narrador en el ciberperiodismo, se realiza al amparo de un nuevo paradigma discursivo denominado hipertextualidad, que constituye la gramática del mundo digital: "organizar información de modo no lineal, narrar con medios digitales,significa enfrentarse a un nuevo paradigma discursivo denominado hipertexto. Se entiende aquí por hipertexto un sistema de escritura ramificada solo posible técnicamente en entornos digitales, que se constituye como un documento electrónico en el que la información se estructura como una red de nodos y enlaces".
Hagamos la prueba con dos metáforas de las que aparecen en la crónica de David Gistau mencionada:


Cine: Kubrick y Tarantino


"Elena Salgado, que ejercía de vicesobrera, estaba dando una réplica rutinaria
al anuncio de Montoro de la decadencia del Estado de bienestar cuando de
repente, referida a la oposición, soltó la palabra «inverecundia». Ante ella,
los periodistas de la grada se quedaron como los monos de Kubrick ante el
monolito. La olisquearon. La palparon con cuidado".
Bastaría con enlazar a este vídeo


Igualmente se puede hacer con la siguiente metáfora:


"(...) sino que maneja el chivatazo y el esbozo de una policía política como un
incordio candente que ha de resolver el ministro del Interior igual que al 'Mr.
Lobo' de Tarantino se le encargaba en Pulp Fiction limpiar el escenario del
crimen".




Aquí el vídeo que se podría enlazar:





¿Adquiere nuevo significado la metáfora? Sí. Por tanto el propio texto adquiere nuevos significados que contribuyen a enriquecer el género de la crónica deportiva. Es tarea de los periodistas adaptarse a este ecosistema novedoso en el que se están desarrollando los medios de comunicación para ofrecer mejores contenidos, contenidos adaptados a las necesidades de un nuevo tipo de lector.

sábado, 14 de mayo de 2011

Twitter como fuente, la necesidad de un marco regulador

Se viene hablando del narrador en medios emergentes y aún no se ha dicho nada sobre los propios medios. Centrémonos en el caso que venimos tratando: Twitter. No solo los periodistas utilizan Twitter sino que los propios medios ya gestionan, como marca corporativa, su presencia y sus contenidos en la red social.

El crecimiento de la plataforma ha sido exponencial desde su nacimiento. En 2006 se produjo su lanzamiento, en 2008 tan solo había 450.000 usuarios registrados pero 2009 finalizó con 75.000.000 millones. Actualmente cuenta con más de 200 millones de usuarios registrados y se envían alrededor de 155 millones de mensajes al día.

España es el país europeo que más crece según datos de ComScore: En 2010 creció un 151% hasta alcanzar la cifra de 2.000.000 de usuarios.

Entre estos 2.000.000 millones de usuarios se encuentran muchos periodistas de diarios españoles y, entre ese grupo de periodistas, se encuentran algunos cronistas deportivos. Sin embargo, se desconoce la existencia de estudios sobre el uso que hace de Twitter los periodistas que trabajan para diarios españoles y, más concretamente, del uso que hacen los cronistas deportivos. En Latinoamérica, Reino Unido y Norte América, sin embargo, sí se conocen algunas investigaciones de diferente naturaleza.

El trabajo de Tania Lucía Cobos, "Twitter como fuente para periodistas Latinoamericanos", presenta una iniciativa interesante -y necesaria- de Reuters:

"En marzo de 2010, Reuters publicó su Handbook Reuters, una guía que buscar orientar a sus periodistas con respecto al comportamiento que deben seguir en redes sociales. Algunas recomendaciones son por ejemplo, que el periodista maneje dos perfiles independientes, uno personal y otro profesional. Este último debe contar con la autorización de sus superiores, ya que demanda dedicación, puede interferir con intereses comerciales o delatar fuentes".

En un ecosistema como el actual que tiende a crecer, regular el uso que hacen de Twitter los periodistas es un trabajo necesario que corresponde a los medios. En primero lugar, para que no se produzca ningua de las situaciones que pretende evitar Reuters y, en segundo lugar, para evitar caer en los errores que denuncia el cuarto paradigma de la comunicación: de la periodicidad al tiempo real.

viernes, 13 de mayo de 2011

Consecuencias de la interactividad: de usuario a 'prosumer', ¿pierde autoridad el cronista?

Una vez analizada la interactividad del cronista deportivo 3.0 conviene reflexionar sobre las consecuencias de la misma. Ya en el año 2000 José Luis Orihuela advirtió que, de entre las señas de identidad de los nuevos medios, era la interactividad la que planteaba "los mayores desafíos a la figuara y funciones tradicionales del narrador". Una interactividad entendida como "la capacidad de participación del usuario en el proceso comunicativo":

"El desafío profesional al que nos enfrentamos en el terreno de la comunicación no consiste simplemente en 'adaptarse al cambio', como si de una moda se tratase, ni tampoco se limita a prepararnos para utilizar con naturalidad un nuevo lenguaje. Lo que se plantea como exigencia es mucho más radical y pasa por comprender y controlar las nuevas características de los medios y de la comunicación pública".

El desarrollo de la tecnología móvil, la irrupción de los Smartphones y el despegue de la red social Twitter ha supuesto, casi una década después, un caldo de cultivo o mejor dicho, un campo de pruebas para reafirmar la teoría de Orihuela.

La interactividad y la participación de los usuarios se ha instalado en el proceso comunicativo de manera que éstos, como ya se dijo, se convierten en muchos casos en fuentes de información e incluso en productores subsidiarios de las informaciones. Es lo que Carlos Scolari ha llamado "prosumers".

Y llegados a este punto cabe hacerse la pregunta: Si los usuarios se convierten en productores de la noticia, ¿se produce una pérdida o una merma en la autoridad del periodista? Veremos que no sino que, por el contrario, la autoridad del periodista sale reforzada. En palabras de José Luis Orihuela:

"La clave de la nueva narrativa ciberperiodística consiste en que los narradores dejen de comprender al periodismo como una "conferencia" y lo comprendan como "una conversación o un seminario". Las audiencias, lectores, espectadores, televidentes, se han convertido en una parte sustancial del proceso comunicativo. Su voz suena ahora junto a las voces "profesionales", y a veces, hasta con más fuerza".

Este fenómeno entronca con lo que Aristóteles definió como el "ethos" y que los académicos Fernando López Pan (Universidad de Navarra) y Juan Carlos Gil González (Universidad de Sevilla) estudian en la columna y el editorial respectivamente.

Así se expresa Gil González en este artículo:

"En definitiva, el ethos hay que entenderlo como “los afectos suaves y tendentes ala captación de la simpatía y del delectare apropiados para ganarse la afición del público de manera duradera, afectos que también aparecen como disposición permanente del alma” (LAUSBERG , 1996: 257. Tomo I). Para nosotros, dentro de esecarácter ético-moral del que se expresa, el ethos también engloba la visión del mundo,las concepciones ideológicas, los valores morales… que se desprendenineluctablemente de la exposición escrita de los hechos y sus consecuencias".

Podríamos decir, por tanto, que un uso acertado de la interactividad y el resto de características propias del narrador en medios emergentes que señala José Luis Orihuela en su artículo, refuerza el ethos del propio narrador, el cronista deportivo en este caso, ya que da voz a los lectores, orienta sus opiniones, las organiza y las transforma en un ingrediente más de la historia que pretende contar o de la que pretende informar. De manera que el periodista no pierde autoridad ni cede autoridad para generar interactividad sino que refuerza su autoridad favoreciendo un proceso comunicativo interactivo.

martes, 5 de abril de 2011

La interactividad del cronista deportivo 3.0

Ya se dijo que una de las características de la crónica deportiva 3.0 era la interactividad. A través de Twitter el cronista puede interactuar con los lectores antes, durante y después del acontecimiento deportivo que debe narrar. Pero no solo interactúa con los lectores, también con sus compañeros de profesión -que pueden estar narrando el mismo acontecimiento o no- y con organismos/deportistas profesionales.

Veamos el caso de Juan José Mateo, cronista deportivo de El País (Tenis):









TRES NIVELES DE INTERACTIVIDAD:

1. LECTORES:

@xtianp87fmif Le resuelve una duda: por qué no está jugando David Ferrer.

@ChristiandAngel Le resuelve otra duda: cómo solicitar una acreditación y cómo concertar una entrevista.

@gandaines Contraargumenta un comentario: que no salió la bola.

@xaalmol Emoticono de sonrisa por este comentario

2. COMPAÑEROS:





Narrando el mismo acontecimiento




3. ORGANISMO/DEPORTISTAS PROFESIONALES:


Las posibilidades de interactividad que ofrece Twitter al cronista deportivo, como vemos, revientan la unidireccionalidad característica del periodismo impreso. Esta herramienta, incluso, permite al cronista rebatir en tiempo real y desde el lugar donde ocurre el acontecimiento deportivo, la opinión de un compañero de profesión que discrepa de la que ha realizado previamente Juan José Mateo.

Y también permite, a través del retuit, informar de una noticia (la baja de Ferrer) utilizando la cuenta de Twitter oficial del torneo, la Copa Davis, que, a su vez, ha utilizado dos etiquetas con el nombre de los tenistas españoles implicados (#Ferrer y #Verdasco). Éste sistema de etiquetas abre nuevas puertas de interactividad más allá del TL rompiendo y transformando así el paradigma clásico de la comunicación cerrada y de masas en una red de comunicaciones tan abierta que ofrece infinitas posibilidades de interacción.

domingo, 27 de marzo de 2011

Metamorfosis de géneros: Hacia una crónica deportiva 3.0

Explica Roger Fidler en 'Mediamorphosis' tres puntos que conviene resaltar:
  1. El contenido de un nuevo medio bebe del contenido del medio anterior.
  2. El contenido del medio más antiguo se transforma con la aparición de un nuevo medio.
  3. El nuevo medio debe encontrar su propia personalidad.
La irrupción de la tecnología y con ella la de redes sociales como Twitter ha afectado al periodismo escrito y dentro del periodismo ha transformado los géneros. Cómo hemos visto, las crónicas nacen antes y mueren después y el proceso informativo se hace transparente a través de Twitter.

Hoy día los acontecimientos deportivos generan una gran audiencia y por tanto la oferta de los medios está inundada de información deportiva. En el caso del fútbol, hace 20 años tan solo era posible ver un partido de Liga por televisión, hoy día se puede ver cualquier partido y muchos de ellos en abierto. Ello ha generado un curioso efecto, la gente comenta sus impresiones sobre el acontecimiento en tiempo real, crea etiquetas como #elniñodetrasdepuyol, e interactúa con los periodista e, incluso, con los propios deportistas.

Ello conlleva una nueva manera de contar las cosas en gran parte impulsada por el cambio tecnológico (ahora los acontecimientos son acontecimientos de masas) y la aparición de una nueva manera de consumir información ligada a la digitalización (esa masa interactúa con los propios periodista y entre ellla convirtiéndose, incluso, en fuente de información o redactor subsidiario de las informaciones).

¿Cómo es la crónica deportiva 3.0?
  • Más valorativa que descriptiva: los acontecimientos son de masas, que además tiene acceso, en muchos casos gratuito a ellos. Esto requiere que el cronista de un paso más allá para ir de la mera descripción de los hechos a un marco donde predomine la interpretación y la valoración del acontecimiento deportivo.
  • Más ancha: La crónica 3.0 nace antes, termina después y hay un contexto de por medio que detallar añadiendo los elementos valorativos e interpretativos que se acaban de comentar.
  • Interactiva: Los lectores ya no sólo demandan información sino interactividad; quieren saber más y conocer más a través del propio periodista. A su vez se convierten, en algunos casos, en fuentes de información e incluso productores subsidiarios de las informaciones.
  • Multimedia: La digitalización de la información y el despegue de la telefonía móvil ha permitido incorporar a la cobertura informativa antes de que la crónica sea publicada en el papel la fotografía, el vídeo e incluso el audio y difundirlo y compartirlo con los usuarios a través de redes como Twitter.

Una crónica boomer

Ya vimos que uno de los efectos que Twitter había provocado en la crónica era el de la transparencia, hoy veremos otro efecto: cómo estirar la crónica a través del Time Line de la cuenta de Twitter del cronista.

Antes de la irrupción del formato digital e incluso hasta que los periodistas han entrado a formar parte activa del Periodismo 2.0 a través de las redes sociales, el acontecimiento que era narrado por el cronista nacía y moría cuando era publicado en el papel. Lo propio de un sistema de comunicación unidireccional, cerrado, de masas. Después de Twitter, esto se acabó.

Como dice José Orihuela en la introducción del libro "Mundo Twitter" que será publicado el 14 de junio,

"Aunque Twitter desapareciera en el futuro como marca o como plataforma, lo que nos ha hecho va a permanecer, ya que ha cambiado nuestro modo de entender y de practicar la comunicación".

A través de Twitter podemos observar cómo una crónica comienza antes, siendo a penas un borrador, y termina horas después de ser publicada. Una crónica puede ser tan larga como un chicle boomer, el feedback generado por la interactividad periodista-lector alarga el proceso informativo; el cronista sigue destripando el acontecimiento del que ha dado parte, sigue informando a sus lectores a través de su Time Line. Volvamos al caso de Juan L. Cudeiro. Esto es lo que muestra su TL unas horas antes de comenzar con la crónica, durante la crónica y unas horas después de haber publicado la crónica.

ANTES Y DURANTE










DESPUÉS









Entre conversación y conversación, el periodista parece haber leído la crónica ya publicada y publica dos tuits en los que deja constancia de estar descontento por la falta de tiempo para escribir la crónica:


Tres días después, cuando el tema parecía enterrado definitivamente, el cronista revive la lo sucedido con José Mourinho para hacer un guiño irónico a su compañera de El País, Eleonora Giovio.

Curiosamente, el 3 de enero, el Real Madrid disputó un encuentro contra el Málaga y la propia Eleonora Giovio fue la periodista encargada de redactar esta vez la noticia discursiva que recogía las declaraciones de José Mourinho. Como podemos observar, el texto guarda una gran similitud con el de Juan L. Cudeiro:
Podríamos decir, según lo analizado, que el trabajo del cronista supera los géneros y que los rescoldos de la noticia discursiva de Juan L. Cudeiro que acompañó a su crónica se extendieron hasta la noticia discursiva redactada por Eleonora Giovio de manera que comparten, incluso, una actitud y una estructura muy similar.

El tiempo real y otros riesgos del Periodismo 3.0

El pasado 20 de febrero coincidieron dos encontronazos periodísticos que ponen de relieve los riesgos que conlleva el cuarto paradigma de la comunicación: de periodicidad a tiempo real.


Aunque el artículo "Los nuevos paradigmas de la Comunicación" fue publicado por José Luis Orihuela hace un tiempo hoy en día siguen de radiante actualidad. Y por tanto la polémica creada por Mister Chip y por As obligan a repensar el papel que juegan los nuevos medios de comunicación y las redes sociales en la profesión periodística en general y en el periodismo deportivo en particular hoy en día. Veamos:

Alexis Martín-Tamayo, Mister Chip, protagonizó un duelo de tuits que recoge www.lainformacion.com Este maniobrar inadecuado que destapa Mister Chip y la misteriosa desaparición de un defensa del Athletic en AS (diario en el que, dicho sea de paso, colabora Mister Chip) nos conduce a un debate necesario sobre cómo los blogs y las redes sociales, un mundo liderado hoy por Twitter, han cambiado y están cambiando las reglas de juego del periodismo deportivo. A este respecto, el periodista Javier Molina Vizcarra publica un interesante artículo en Razón y Palabra, "Periodismo deportivo 3.0" en el que hace la siguiente reflexión:

La herramienta/medio de comunicación que es el Internet ha impuesto nuevos parámetros a la profesión, la ha socializado y a través de sus redes ha convertido a nuestro mundo en un abanico infinito de información fluctuante, interactiva, dispersa, sintética y libre.

La creación de los blogs, las wikis o las redes sociales, a través de lo que Tim O´Rilley definió como la WEB 2.0,8 ha transformado la manera en que el ser humano se comunica e informa. El modelo de “uno a muchos” está en juego frente a la voz libre del “uno a uno”. Sin embargo, no necesariamente significa que vayan en caminos opuestos, por el contrario, podrían unir, por un lado su profesionalismo, y por el otro la credibilidad e interacción realizable, ya que “el problema de las televisiones y, en general, de todos los medios de comunicación, es que son tan grandes, influyentes e importantes que han empezado a construir un mundo propio”,9 olvidándose de quien compone a la noticia, es decir, del hombre mismo.

Es por eso que el periodismo y los medios de comunicación tradicionales deben adoptar estos nuevos conceptos, usar e integrar esta forma de periodismo digital que se funde con el participativo o ciudadano -ese que le permite a cualquiera con una computadora y una señal de Internet expresarse, generar contenido y penetrar en la opinión de un mundo virtual y creciente-, pero al mismo tiempo requieren aprender a cualificarlo, a administrarlo, a utilizar esa intuición, talento y principios éticos que deben ser natos para el periodista profesional, con el fin último de contar historias de manera más transparente, menos manipulada, más objetiva.

Sin embargo la realidad es bien distinta de cómo debería ser. Ayer mismo, mucho antes de que saltara la polémica por el error de As, Jesús Gálvez, con su característica ironía pictórica, se atrevió con un pronóstico que, pasadas las horas, se vio superado por la realidad de los acontecimientos. Ni siquiera Alfredo Relaño, director de As, sabe qué ocurrió con el defensa del Athletic.



Si la profesionalidad de As no quedó muy en entrendicho, sí quedó la de sus compañeros de El Día Después, encabezados por Juanma Castaño, cuando a comienzos de temporada publicaron como verdadero un fotomontaje del propio Jesús (fake de Marca) evidenciando así una preocupante falta de rigor profesional. Como los compañeros de EFE con el tuit de Mister Chip, los compañeros de El Día Después pasaron por alto dos de las reglas inquebrantables del periodismo: contrastar la información y citar la fuente.




Aquí el montaje de Jesús Gálvez:


Las Reglas de Juego que rigen la información periodística siguen siendo claras hoy, pero los profesionales parecen no entender el nuevo contexto en el que se está desarrollando la profesión. Este nuevo contexto está exigido por una actualidad a veces nociva, fomenta la interactividad del lector con el periodista y, por tanto, los niveles de exigencia y veracidad de las informaciones son mayores. La comunicación ahora es bidireccional, tiene las mismas fronteras de siempre aunque son más los vigilantes que controlan el flujo. Cuanto más canales y fuentes de información, más precaución.

En este Periodismo Deportivo 3.0 la profesionalidad y la honestidad están más expuestas que nunca. Si la información que un periodista publica pertenece a un bloguero o a un tuitero, así debería hacerlo constar el periodista. Como también deberá extremar las precauciones para no publicar una información falsa. La credibilidad de la profesión está en juego.

Twitter y la transparencia de la crónica deportiva

El pasado 27 de febrero el cronista de El País Juan L. Cudeiro escribió la crónica "El Madrid encalla en Riazor", que narraba el encuentro de Liga disputado en La Coruña entren el Deportivo y el Real Madrid. Junto a la crónica también redactó una noticia discursiva en la que recogía las declaraciones, entre otros, del técnico del Madrid, José Mourinho y dejaba entrever que el entrenador se había dirigido a un periodista durante la rueda de prensa invitándole a "hacer bien su trabajo":


Para el lector que no tenga conocimiento de la cuenta de Twitter de Juan L. Cudeiro, el reproche de José Mourinho quedó ahí. Para los lectores que, además, sean followers del periodista de El País, saben mucho más: ese periodista fue el propio Juan L. Cudeiro...



Saben eso y saben mucho más ya que el cronista expresó sin la atadura editorial de El País su versión de lo sucedido, cómo hubiera respondido y cuenta que no tuvo derecho a réplica porque los responsables de prensa del Real Madrid "no conceden derecho a repreguntar".

Todo esto sucedió a penas una horas después del partido, cuando la crónica ya estaba publicada en la red. La captura que he realizado solo resalta el tramo de TL en que Juan L. Cudeiro explica lo sucedido pero si se observa su TL con detenimiento veremos cómo los lectores e incluso los compañeros de otros medios -presentes también en la rueda de prensa- interactúan con el cronista e intercambian opiniones e ironías.

El fenómeno de Twitter, como demuestra este caso expuesto, contribuye enormemente a hacer transparente el proceso informativo de manera que los lectores ahora conocen detalles en tiempo real que sin la existencia de herramientas como Twitter jamás hubiesen tenido conciencia de ellos. Las ventajas de un periodismo transparente son numerosas, ahora está en los medios explotar de manera adecuada las herramientas de las que dispone para sacar réditos de dichas ventajas.

De McCombs y Shaw a 'El niño detrás de Puyol'

La irrupción del 2.0 en el sector de la comunicación ha tambaleado la Teoría de la agenda- setting expuesta por McCombs y Shaw en la década de los setenta. Si antes eran los medios quienes encauzaban la opinión pública a través de la televisión, la radio o el papel, ahora son los usuarios de medios quienes han revertido la situación.

¿También afecta este cambio de orden al cronista deportivo, cuyo trabajo periodístico se reduce a la narración de un acontecimiento concreto y cerrado a la duración del mismo? La respuesta es sí. Tomemos un ejemplo.

El pasado 8 de marzo se disputó el encuentro de vuelta de los 1/8 de final de la Uefa Champions League entre Barcelona y Arsenal (el acontecimiento más visto de la temporada hasta el momento en la televisión). Durante la retransmisión del partido, a cargo de RTVE, ni Puyol ni Piqué, habituales titulares del Barcelona, pudieron disputar el encuentro y lo tuvieron que seguir desde la grada. Allí fueron enfocados constantemente por las cámaras de RTVE para seguir sus reacciones y tras ellos se pudo ver a un niño de color.

En seguida en Twitter se creó el hastag #elniñodetrasdepuyol y en cuestión de horas la etiqueta se convirtió en Trend Topic y dio el salto a Facebook, se propagó por la red a través de fotomontajes y finalmente fue recogido por los medios. Veamos el caso de ABC.




La crónica del encuentro, escrita por Enrique Yunta, no recoge alusión alguna al topic, sin embargo, un día después, ABC lo recoge en su edición digital como muestra la captura realizada.

Es cierto que la tarea periodística del cronista es narrar el acontecimiento deportivo, pero el nuevo ecosistema, adoptado ya por los medios, requiere un paso más, estar Twitter. Y se da el caso de que Enrique Yunta forma parte activa de la red social y que el mismo día del encuentro y al día siguiente, el día 9 de marzo, el periodista estuvo tuiteando.



Una vez invertido el proceso que comentábamos al principio (los consumidores de los medios mueven un topic en la red y lo cuelan en los medios), la función del periodista, al cronista en este caso en concreto, se le presentan nuevas exigencias: si estás en Twitter y estás en el lugar de los acontecimientos, al cronista se le abren nuevos frentes narrativos. En este caso, por ejemplo, como abordar al niño en cuestión o contar su historia.

En definitiva, atender a las preguntas que plantean los usuarios de los medios, porque los usuarios, esto no cambia, siguen acudiendo a los medios de comunicación para satisfacer su necesidad de información. Lo que sí ha cambiado es que ahora los usuarios tienen el poder mediático para colar su demanda en los medios y la posibilidad de interactuar con el periodista, incluso, en tiempo real.

Pero no debemos olvidar que la función del periodista también es, en último caso, la de filtrar dicha información. Antes de ser publicado el Trend Topic debería ser el periodista, según su criterio, quien decidiera la relevancia del contenido en cuestión. De lo contrario la figura del periodista se podría ver afectada por un relativismo nocivo para todos.

lunes, 14 de marzo de 2011

Crónica deportiva literaria

Los géneros periodísticos, así como los literarios, son cambiantes e inestables, se revisan, se modifican o se crean según se descubren nuevas tendencias, aparecen nuevas creaciones del lenguaje y ahora también según avanza la tecnología, la cual modifica la forma de comunicarnos, el modo de conocimiento y la transmisión de textos periodísticos y literarios a una velocidad vertiginosa.

Mi tesis doctoral, “La crónica deportiva literaria como género de autor en la prensa española”, presenta tres grandes objetivos:

- Revisar el género de la crónica centrándome en la crónica deportiva para definir las estrategias argumentativas y narrativas que la convierten, actualmente, en un discurso periodístico relevante en la prensa española.

- Revisar el subgénero del Periodismo Literario y señalar las relaciones que existen entre la crónica deportiva y la literatura a la hora de elaborar determinadas estrategias discursivas y narrativas para narrar acontecimientos deportivos. Explicar qué se entiende por “crónica deportiva literaria” y por qué se trata de un género de autor.

- Analizar si influye o no el fenómeno de las redes sociales -centrándome en el caso de Twitter,- y cómo influye en la crónica deportiva de autor. Este último punto será el objeto del trabajo de investigación que deberemos presentar el 13 de mayo.

Al abrigo de las redes sociales se está forjando una generación de lectores de prensa que también incluye al lector de prensa deportiva. Este perfil novedoso de lector de prensa deportiva demanda unas necesidades que los medios españoles actuales necesitan estudiar para encontrar los discursos argumentativos y narrativos más apropiados para satisfacerlas. Detectar y definir estos discursos es también un objetivo de mi investigación.